Más allá de una Sonrisa Especial

Cada vez que un niño sonríe, nos está regalando gran parte de su inocencia; nos está dejando ver en lo más profundo de su corazón, donde guarda sus sentimientos y emociones más atesoradas; nos está mostrando un pedacito de su SER; y cuando esta sonrisa pertenece a un angelito que posea alguna condición que comprometa de alguna manera su estado de Salud General o su proceso de Crecimiento y Desarrollo; el regalo que nos concede a través de su sonrisa es simplemente una BENDICIÓN; y en consecuencia, debe representar para nosotros, como padres, un compromiso y una gran responsabilidad; mantener lo más sana posible esa invaluable sonrisa.

Es en este preciso momento, en el cual se hace imprescindible la participación del Odontopediatra, como profesional encargado de velar y cuidar por mantener una correcta SALUD BUCAL en todos los niños que posean cualquier condición de atención especial. Es por ello, que es súper importante tener en cuenta, que la Salud Bucal del niño repercute significativamente en su estado de Salud General; que un proceso carioso, no tratado, por ejemplo, en un niño con Autismo, puede convertirse en un foco de infección y conllevar a padecer complicaciones más severas.

De esta manera, la única herramienta realmente efectiva que está al alcance de nuestras manos para garantizar y mantener un estado de salud bucal óptima, en nuestros angelitos, es a través de la PREVENCIÓN; lo cual debemos llevar a cabo, asistiendo a consulta de manera regular con el Odontopediatra y siempre con fines preventivos no curativos; NO se recomienda esperar a que el niño presente algún dolor o molestia para acudir a consulta; ya que, en estas condiciones, lo más complicado será el proceso de adaptación al tratamiento que se requiera realizar.

TODOS LOS NIÑOS CON CUALQUIER CONDICIÓN DE ATENCIÓN ESPECIAL deben asistir a consulta con el odontopediatra de manera PREVENTIVA, con una regularidad de cada tres o cuatro meses; en función de la severidad de su condición. TODAS LAS MAMITAS Y PAPITOS ESPECIALES deben recibir la EDUCACIÓN, ORIENTACIÓN Y ENTRENAMIENTO necesarios, para poder ser Promotores de Salud Bucal con sus hijos, en sus propios hogares primero; y multiplicadores de esa información donde quiera que se encuentren.

El mejor Tratamiento siempre será la EDUCACIÓN para la PREVENCIÓN.